Su tamaño es 2 veces mayor que los virus tradicionales, además poseen metabolismo propio
Los científicos que trabajan en el Círculo Ártico han estudiado durante las últimas décadas varios virus de carácter masivo que podrían haber sido despertados a causa del reciente derretimiento de los polos.
En 2015, investigadores de Siberia descubrieron un virus llamado Mollivirus Sibericum en los restos fosilizados de un animal de 30 mil años de edad. Lo cultivaron y ha sido objeto de estudio reciente. En sus investigaciones descubrieron que éste mide el doble que los virus tradicionales y puede habitar debajo del suelo en un clima de frío extremo.
Algunos investigadores han sugerido que estos enormes virus podrían sobrevivir descongelados y propagar enfermedades. Sin embargo, por ahora, están siendo controlados en laboratorios y se ha descubierto que no poseen patógenos que puedan causar efectos en los humanos.
El tamaño inusual del Mollivirus difiere de la gran mayoría de los genes. Aunque los virus no son considerados seres vivos, estos gigantes parecen tener cualidades que los acercan a serlo, como un metabolismo en funcionamiento.