Incluso el CEO de Google, Sundar Pichai, intervino sobre el tema
Los emojis han provocado un acalorado debate en Internet sobre la correcta colocación del queso en una hamburguesa, y ahora incluso el CEO de Google se ha involucrado.
El domingo, el autor Thomas Baakdel envió el tuit que desató toda la conmoción, junto con una imagen de los emojis de hamburguesas rivales de Google y Apple, escribiendo: “Creo que necesitamos tener una discusión sobre cómo el emoji de hamburguesa de Google está colocando el queso debajo de la carne, mientras que Apple lo coloca en la parte superior.
Después de un rato, la discusión era fuerte con una interacción de casi 17 mil personas y mil 500 respuestas. “Obviamente, el queso debe estar encima de la carne, pero el tomate debe separar a la lechuga, por lo que ambos están equivocados”, escribió un usuario de Twitter.
Otro intervino con un diagrama, que colocaba los ingredientes de la siguiente manera: pan, mayonesa, cebolla, lechuga, tomate, queso, carne, pepinillos, mostaza, ketchup y pan.
¿Por qué existe una diferencia tan grande en la forma en que diferentes compañías tecnológicas realizaron los emojis de hamburguesas?
Bueno, todo empieza en la forma en que funcionan los emojis. Son creados por el Consorcio Unicode, una organización sin fines de lucro que crea estándares para garantizar que el texto sea legible en múltiples plataformas (por lo que un mensaje enviado en un iPhone todavía tiene sentido cuando se lee en un teléfono Windows, por ejemplo).
Unicode proporciona un poco de orientación sobre cómo deberían verse los emojis, pero más allá de eso depende de las compañías crear sus versiones. De ahí por qué Microsoft acomoda los ingredientes de la hamburguesa de forma diferente a Facebook, o porque LG elimina totalmente el tomate.
Sundar Pichai, CEO de Google, habló sobre el tema durante el fin de semana y dijo que Google “abandonará todo lo demás que esta haciendo”, bromeó.
Pero, ¿por qué estas empresas optan por crear diferentes diseños? En definitiva, todo se reduce a gusto personal. No hay una hamburguesa definitiva, y no hay una forma definitiva de organizar sus ingredientes.
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