A este proyecto se le ha llamado “el milagro del cerdo”
Desde la década de 1980, China ha modernizado rápidamente su industria porcina para satisfacer las demandas de una clase media recién enriquecida. Ahora, la mitad de los cerdos del mundo, unos 700 millones de animales, viven y mueren en China, la mayoría en enormes granjas. Y para ayudar a manejar esta horda de porcinos, los agricultores del país están recurriendo a una herramienta decididamente no tradicional: la inteligencia artificial.
A principios de este mes, el gigante tecnológico chino Alibaba firmó un acuerdo con la corporación de cría de cerdos Dekon Group y el fabricante de alimento para cerdos Tequ Group para desarrollar y desplegar sistemas de rastreo de cerdos alimentados con IA. Según informó el medio chino Synced, el acuerdo vale decenas de millones de dólares, y se basará principalmente en la visión artificial para reemplazar las etiquetas inalámbricas de radiofrecuencia (RFID) utilizadas para seguir a los cerdos en las granjas
Las etiquetas RFID son confiables, pero costosas y lentas de administrar. Deben montarse en cada cerdo y escanearse individualmente para rastrear. Con millones de animales criados cada año en granjas grandes, esto puede ser un verdaderamente difícil.
La solución que proponen es utilizar tecnología de visión artificial, rastrear cerdos utilizando cámaras superiores que identifican los números tatuados en sus cuerpos. En un nivel básico, este sistema podrá contar cerdos y lechones, pero Alibaba espera que también ofrezca un análisis más sofisticado.
Por ejemplo, al combinar las lecturas de temperatura de los sensores infrarrojos con registros de cuánto se mueve cada cerdo cal día, la IA podrá estimar la salud de los animales. Las herramientas de reconocimiento de “voz” conectadas son aún más inteligentes. Se podría alertar a los agricultores cuando los lechones están siendo aplastados por sus madres al escuchar los chillidos de los cerdos jóvenes. (Alibaba afirma que este sistema por sí solo reducirá la tasa de mortalidad de los lechones en un tres por ciento anual.) Otro tratará de controlar la propagación de la enfermedad mediante el registro de los sonidos de la tos de los cerdos.