Pero no es el primero, ni el único en hacer cosas así
En el núcleo de la mayoría de las redes de criptomonedas están los mineros, las personas que usan equipos informáticos especializados para asegurar la cadena de bloques de la criptomoneda, al realizar ecuaciones matemáticas millones de veces por segundo.
A cambio de este trabajo, y los gastos que vienen de esto, los mineros son recompensados en criptomonedas proporcionales a su contribución a la red. Dado el alto costo de la inversión que implica ser un minero, tiene sentido que traten de maximizar sus ganancias de cualquier manera posible.
Esto también ha ocasionado que los mineros hagan de todo para cuidar sus criptomonedas, desde ejecutar un equipo de minería en la parte posterior de un Tesla, instalar una plataforma en un campo de energía eólica y lo más loco hasta el momento: crear una plataforma de minería de bitcoins y sumergirlos en un tanque de petróleo.
¿Con qué objetivo? pues los servidores pueden calentarse mientras se están ejecutando, por lo que el calor los puede dañar rápidamente. Para evitarlo, el minero Limping Zebra adaptó un sistema de enfriamiento que dio como resultado el tanque.